viernes, agosto 19, 2005

Ying Yang...again

Hace tiempo que escribí un post sobre el Ying Yang, sin embargo hoy he tenido uno de esos flashes de iluminacion que me han hecho plantearme el escribir otro sobre el mismo tema, en realidad creo que tambien lo podría haber titulado de otra manera pero siempre me han gustado las cosas orientales.

Lo que queria contaros es otra de mis reflexiones, de esas raras que se me ocurren cada vez que me patinan las neuronas un poco, de esas que a algunos de vosotros os gustan y, a veces, os hacen hasta gracia.

El Ying Yang representa el equilibrio perfecto, frio calor, hombre mujer, blanco negro, creo que todos debemos mantener un equilibrio en nuestras vidas y ultimamente me he dado cuenta de lo importante que es esto para la mia, y me explico.

El otro dia yendo a comer con unas compañeras de trabajo en el telepizza estaban todas como pollos sin cabeza, una jauria de niñatas (perdon por la expresion pero eso fue lo que me parecieron en aquellos momentos, que mas que con gente de veintimuchos parecía que estaba con crias de 15 añitos...sin tener el cuerpo de estas últimas claro está) que lo único que consiguieron es ponerme la cabeza como un bombo, fue curioso pues cuanto más histéricas y más asilvestradas estaban, más y más tranquilo y más callado me quedaba yo, hasta el punto de recluirme en mi mismo en la cúspide orgíastica de compañerismo entre ellas.

A esto me refiero, a que ultimamente en mi vida me he dado cuenta de que no puedo llevar las cosas a los extremos, pues me hacen daño, me duelen despues, si estoy muy muy triste me cuesta mucho recuperarme (casi dos dias la ultima vez) y si estoy muy muy alegre el bajón de después me hace quedarme atontolinado durante mucho tiempo tambien.

Creo que es cuestión de hormonas, como casi todo en esta vida, pero tambien creo que es cuestion de actitud hacia las cosas, por eso ahora intento tomarme las cosas en su justa medida, ni muy fuerte ni muy debil, ni emocionarme muchisimo (recordad la formula de la frustracion) ni ser un ser de hielo y piedra al que nada le afecta, las cosas me afectan igual o más que antes, pero intento que en mi dia a dia las emociones no me controlen y las controle yo mismo.

Por eso ahora mismo cuando me viene un ataque de alegria, un subidon demasiado salvaje, o algo por lo que pueda llegar a obsesionarme, intento cortar un poco, nunca del todo claro está, pues la vida tambien consiste en ser feliz y disfrutar de esas pequeñas cosas que te hacen mas feliz, pero si que intento controlar esos subidones y esas bajadas salvajes de ánimos, que tambien me dan, en este ultimo caso es cuando me miro al espejo, me sonrió a mi mismo y veo lo majo y lo maravilloso que soy...y lo peor es que me lo creo.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo intento lo mismo, lo peor de todo es que a veces consigues engañarte a tí mismo, si te lo tomas como una época, guay, pero no lo adoptes como sistema de vida.