viernes, mayo 18, 2007

A la inversa

Sin duda se me hace tan raro todo esto, verte así, cuando desde el principio de los tiempos recuerdo la situación inversa. Supongo que es como cuando te vas a morir, y dicen que ves toda tu vida pasar por delante de tus ojos a toda velocidad, pues eso mismo es lo que ahora me pasa.

Veo como cuando nos conocimos, allá por el colegio yo siempre te perseguía para levantarte la falda con la unica intención de, ahora me doy cuenta, pasar tiempo contigo y atraer tu atencion.

De como más tarde te fui rondando, insistentemente, y tu te aprovechastes de aquello.

Como, tras mucho esfuerzo, conseguí que salieses conmigo, si es que a eso se le puede considerar salir, con sus altibajos, mas bajos que altos, con sus alegrias y penas, mas agrias que dulces.

Recuerdo como te creí la primera, la segunda y la enémisa vez que me dijistes que era la última vez que pasaría, que jamás volverías a irte con otro estando conmigo, y como yo, iluso y emocionado por aquello que debía ser amor, te creia.

Me vienen a la memoria vigilias de tus miles de borracheras, de como te enfadabas conmigo cuando estabas en ese estado y yo soportaba estoicamente tus reproches, broncas y malos humores, para acabar sujetándote la cabeza con todo el cariño del mundo mientras tu vomitabas tu orgullo junto con el resto de lo que había en tu estómago.

Supongo que siempre te vi desde abajo, como desde una escalera donde tu jugabas a ser la reina de la montaña y yo siempre era el que caía escaleras abajo.

Por eso se me hace tan raro verte ahora, en medio de la calle, tras tantos años de no saber de ti desde que te fuistes con aquel personaje que conocistes dios sabe donde, delante de mi, casi de rodillas cuando antes me mirabas por encima del hombro, con los ojos húmedos, los mismos que me miraban con desprecio y asco cuando decía algo que no te gustaba.

Quizás por todo esto te he cogido de las manos, que te tiemblan,

Quizas por esto he depositado un beso tierno en tu frente,

Y, tan sólo quizas por esto, mirándote a los ojos te he susurrado con voz suave en tus pequeña y linda orejita:

- Muérete . -

Y entonces me he dado cuenta de que quizás el amor si tenga fecha de caducidad...

8 comentarios:

Eowyn Zirbêth dijo...

Está bien, está bien, ya dejo de maltratarte. No veas como te las gastas. XDDDDDD.

Anónimo dijo...

son sorpresas que te brinda el destino...."lo que se hace se lo cobra el destino"sin meter tu las manos es por eso mejor dejar en todo en las manos de la vida,pues ella se encarga.....a veces das tu corazön a las personas equivocadas...pero las que se dañan son ellas al burlarse de tus sentimientos y despues de un tiempo sentir arrepentimiento por su equivocacion y al saber que nadie las querr@a mas que aquella persona con la que juguaron;mas vale perdonar.... haaaa pero eso si no regresar con la persona qu hizo el daño pues el que la hace una vez la hace dos y esa herida que dejaron es muy dificl de cerrar,mas vale terminar bien no....no se vale jugar con los sentimientos de nadie,mas vale un no a tiempo y mas vale un amigo que un enemigo.fijate a quien le brindas el corazón.
y si eres tu el que fallo;
nadie sabe lo que tiene hasta que se lo ve perdido.
chao.niño.

MUAAAACK!!!!

LiLuh dijo...

Me ha gustado mucho, me he visto en esa situación (en la tuya)y es muy triste cuando las cosas cambian, aunque también placentero.

eomyr dijo...

Sin duda el amor tiene fecha de caducidad. Deberían llevarla tatuada en una nalga.

UnderPressure dijo...

Pues yo creo en el amor eterno....aunque es posible que no hacia la misma persona.

aL* dijo...

Es una de las cosas que más me han gustado. Muy bueno, de veras. ^^

Anónimo dijo...

Bueno, a mi esa fecha aún no me ha llegado... y no sé si exista fecha de caducidad para el amor, o la fecha de caducidad es para el desengaño... Pero en todo caso, el relato me ha encantado... Brillante!!

Besos

Anónimo dijo...

matame cuantas veces quieras ...
dark